Un precio de producto bien definido puede generar la diferencia entre una nueva empresa que triunfa y una que no genera las ventas necesarias para sobrevivir.
Imaginemos un caso hipotético: Ana decidió emprender y crear un negocio de venta de zapatos y accesorios. Para definir cuánto le cobraría a sus futuros clientes, recibió consejo de algunos amigos, visitó las tiendas de posibles competidores y buscó precios en un conocido marketplace en línea.
La tienda de zapatos se inauguró, pero en pocos meses Ana comprendió que los ingresos por ventas no eran suficiente para cubrir sus costos de alquiler, pagos a proveedores ni su planilla; se vio obligada a cerrar su nueva empresa poco después de cumplir un año.
¿Dónde estuvo el error y qué debemos hacer para elegir un precio de producto que se adecúe a nuestras necesidades como negocio?
Este caso no es poco común: cientos de negocios se encuentran en situaciones similares, donde el bajo control financiero genera descuidos en la relación entre ingresos y egresos generados.
¿Nuevo en las finanzas? Sigue estos pasos para comenzar a llevar tu Contabilidad.
Elegir el precio de producto correcto es esencial para determinar el éxito del negocio; toma en cuenta los siguientes elementos para triunfar en tu primer año.
Comprende tu mercado y qué deseas vender
El objetivo principal de tu negocio está en lograr ser rentable en sus primeros años.
Un paso sencillo pero necesario es conocer la demanda del mercado para planificar tus metas de ventas y consecuentes ingresos. En este punto es esencial estudiar los distintos modelos de negocio utilizados por empresas de tu sector, y utilizar datos certeros generados por estudios de mercado para garantizar una demanda de producto constante.
Guía: Cómo definir el precio de un producto o servicio por primera vez.
Los primeros contactos con clientes te ayudarán a obtener el instinto de vendedor para tomar buenas decisiones administrativas a nivel de gestión de inventario, pero no puedes quedarte sólo en las corazonadas.
Es esencial que desde un inicio lleves las métricas exactas sobre cada movimiento de ventas; de esta forma, podrás definir el rendimiento de cada producto (es decir, cuál genera ventas y cuál no) y planificar tus estrategias con base a los ingresos con los que ya cuentas.
Estudia costos para aprovechar la productividad de productos
Como explicamos en un artículo anterior, no todos los costos son iguales. Manejar tus Finanzas de forma ordenada te permitirá estudiar si los ingresos que estás generando son suficientes para cubrir costos indispensables para el funcionamiento de tu negocio, como:
- Alquiler de locales;
- Manufactura del producto, empaquetado;
- Costos de envío de productos;
- Salarios y costos relacionados;
- Mercadeo y ventas;
- Mantenimiento del sitio web;
- Impuestos y compromisos legales.
¿Qué órdenes de compra necesito realizar constantemente para actualizar mi inventario? ¿A qué producto conviene darle un empujón con una estrategia de mercadeo? Con el estudio de productividad de tus productos, podrás planificar fácilmente tu siguiente inversión.
No escatimes en dedicar tiempo cada semana para planificar el abastecimiento de productos, hasta que sea algo rutinario; llevar una buena relación y comunicación constante con tus proveedores te ayudará a tenerlo todo en orden para que tus clientes nunca encuentren estantes vacíos donde debía estar tu producto insignia.
Utiliza una herramienta que te ayude a predecir ingresos
Por último, es importante que te alíes de las herramientas que te ayudarán en la automatización de tareas manuales como la recolección de datos y el análisis rápido de reportes.
Si cuentas con un sistema de Punto de Venta (POS) o de facturación, tendrás acceso a cientos de funcionalidades para generar reportes de ventas, programar ajustes de inventario y manejar la disponibilidad de productos incluso entre múltiples sucursales.
Prueba las funciones que ofrece la Nube y comienza a vender ahora que ya definió el precio de producto o servicio de su negocio.